Dos personas fundidas sin razón alguna son dos fantasmas danzando alrededor de la luna.
Un minuto recorrido por un beso absorbe toda una vida dedicada a uno mismo.
Amar no es compartir, es poseer, poseerse a sí y no dejar que se pierda su esencia en lo amado.
Amo mi vida y amo mi dedicación. Algún día dejaré de amar, pero entonces no podré decir adiós...
Hermoso, ciertamente hermoso...
ResponderEliminar