"Éste es el relato más triste que nunca he oído..."

Ford Madox Ford (El buen soldado)

martes, 23 de noviembre de 2010

El bocadillo insólito

Una rebanada de pan tostado para que pueda soportar el peso de todo lo amado.
Un poco de tomate y mayonesa para untar y que no esté seco por debajo del queso.
Encima se sitúa un buen tomo de lomo, asado o a la plancha, eso nos da igual
y para que quede bien sabroso aderezarlo con mucha pimienta y una pizca de sal.
Dos hojitas de lechuga bien limpias y verdes para empujar y poder rebajar.
Tomate natural y un huevo cocido que en rodajas se ha de cortar,
con mucho mimo la otra rebanada de pan y una olivita ensartada para adornar.

Comer es un placer...Es un bocadillo normal.

¿Lo es?

No... Ante tal cantidad de grasas sin sentido y sabor desmedido sólo se puede decir de él que pueda, como poco, caminar. Directo al intestino y pasando por el estómago, una vez ingerido no deja de hablar:

-¿Por qué me has comido? ¿Por qué así conmigo no tuviste piedad?

Sólo se me ocurre una respuesta posible que que le pueda recetar:




Para JJ. Especialmente...

2 comentarios:

  1. ¿porqué si el paralito tiene dos propulsores en la silla de ruedas necesita que lo lleven?

    ResponderEliminar
  2. Aun así no has comprendido la metafíííísica del comer...

    Tú...dame filete...que yo ya...pero dame filete...

    ResponderEliminar